Estas dos notas que emanan de un sector identificado como el Sindicato de Córdoba que posee una inscripción gremial, tiene como único objetivo la conformación de una federación que logre la nulidad de la personería gremial 1.604 que le da categoría de sindicato de primer grado a la Unión de Conductores de Autos al Instante y Remises de la República Argentina (UCAIRRA).
Consultado sobre ello, el doctor Martínez Chaz, apoderado de la Comisión Arbitralla CGT , explicó: “estas agrupaciones sindicales con inscripción gremial que pretenden una compulsa con UCAIRRA contradicen con su accionar legal pero ilegitimo, su intensión de participar en el acto eleccionario convocado por el delegado normalizador de la entidad sindical de primer grado”.
Todos estos grupos suelen tener una actitud dual que termina beneficiando a las patronales mientras el Sindicato no funciona en defensa del legítimo interés de los trabajadores del sector. Es el caso de la tan oronda señora Baudin, declarante de las notas de referencia, que fue procesada y detenida en Almirante Brown por presunta estafa debido a que solicitaba pagos en efectivo cuando el Sindicato estaba funcionando y tenía sus cuentas para efectuar los depósitos en Bapro, ahora aparece aliada de personajes de dudosa trayectoria de la Ciudad de Córdoba, como el señor ‘Pochoclo’ Taborda, donde pese a que hay miles de trabajadores del sector no pueden presentar en tiempo y forma un simple padrón con cien afiliados como exige el estatuto de UCAIRRA, sin embargo en una actitud sibilina a favor de los empresarios y con el aval de funcionarios ministeriales, más propensos a atender los reclamos de las cámaras de remiserias que los justos reclamos de los trabajadores explotados e indefensos.
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